-La agencia y Lokheed Martin presentan su nuevo avión supersónico que reduce el estampido sónico
-La NASA: «Al demostrar la posibilidad de realizar viajes comerciales supersónicos silenciosos sobre tierra, buscamos abrir nuevos mercados»
This is not a render.
This is the X-59, a single-seat X-plane aiming to reduce the sound of the sonic boom to a mere thump. It opens the possibility for commercial supersonic flights over land, which has been prohibited since 1973. Be on the lookout for first flight! pic.twitter.com/7MZQZoyVjG
— Lockheed Martin (@LockheedMartin) January 12, 2024
La visión de vuelos supersónicos comerciales sin el estruendo ensordecedor ha dado un paso más cerca con la presentación oficial del X-59 por parte de la NASA y Lockheed Martin. Este jet, diseñado para superar la velocidad del sonido sin generar molestias acústicas, promete conectar ciudades como Madrid y Hamburgo en una hora. Después de años de desarrollo y ajustes, la agencia espacial presentó el prototipo en las instalaciones de Lockheed Martin en Palmdale, California.
El evento, transmitido en vivo, no solo reveló el asombroso diseño del X-59, sino también proporcionó información clave sobre su programa asociado, Quesst. La NASA anunció que planea que el avión despegue a finales de este año, marcando su primer «vuelo supersónico silencioso». Sin embargo, esto es solo el comienzo de una serie de pruebas y operaciones que incluyen vuelos sobre ciudades en 2026-2027.
El X-59, con una velocidad objetivo de Mach 1,4 (aproximadamente 1,700 km/h), destaca por su diseño único y tecnologías avanzadas. Su morro largo y cónico, la ausencia de una ventana frontal para el piloto, y un sistema de visión externa mediante cámaras de alta resolución son elementos clave para lograr vuelos supersónicos silenciosos.
El proyecto Quesst de la NASA tiene como objetivo allanar el camino para vuelos comerciales supersónicos sin causar molestias acústicas, desafiando las restricciones que han estado vigentes durante 50 años. Los datos y tecnologías generados por el X-59 se compartirán con reguladores e industria, buscando abrir nuevos mercados y beneficiar a los viajeros de todo el mundo. Aunque el camino es largo, el X-59 promete ser un catalizador para una nueva era de aviones supersónicos comerciales.