El diente de megalodón es de 6,8 centímetros de altura y fue encontrada entre las Montañas del Pacífico Medio y la Cordillera Line Islands en el Océano Pacífico
En una zona nunca antes estudiada del Océano Pacífico, un sumergible operado por control remoto hizo un descubrimiento sorprendente: un diente del tiburón Megaselachus, comúnmente conocido como megalodón, uno de los tiburones prehistóricos más grandes registrados. Este hallazgo, detallado en un estudio publicado en la revista ‘Historical Biology’, se realizó a una profundidad de 3.090 metros.
El diente, que mide 6,8 centímetros de altura, fue encontrado entre las Montañas del Pacífico Medio y la Cordillera Line Islands en el Océano Pacífico. Esta región está caracterizada por montañas submarinas aisladas y cadenas volcánicas submarinas lineales.
Lo destacado de este descubrimiento es su ubicación inusual, ya que «el fósil fue descubierto en una localidad muy remota de aguas profundas en la que rara vez se documentan fósiles de megalodón», según uno de los coautores del estudio.
El hallazgo proporciona información clave sobre la distribución del megalodón, indicando que esta especie no era exclusivamente costera y migraba a través de cuencas oceánicas de manera similar a algunos tiburones modernos, como el gran tiburón blanco.
El diente del megalodón estaba parcialmente incrustado en el sedimento en el momento de su recogida, y su dentado bien conservado sugiere que el fósil no experimentó un transporte significativo o desplazamiento. La muestra ha sido enviada al Laboratorio de Muestras Geológicas Marinas de la Universidad de Rhode Island para un análisis más detallado.
Durante millones de años, el megalodón dominó los océanos, alcanzando longitudes de más de 15 metros y alimentándose de los mamíferos marinos de su época.