Sorprendentemente, una tribu en el norte de Australia, en Papúa Nueva Guinea, ha capturado la atención de los científicos debido a su ADN único, una verdadera rareza en el panorama genético mundial.
Investigadores de la Universidad de Texas revelaron esta fascinante teoría en una conferencia en Vancouver en 2016. Mientras en la especie humana se han identificado huellas de dos homínidos, Neandertal y Denisova, los melanesios presentan un misterioso ADN que no se asemeja a ninguno conocido hasta ahora.
A diferencia de otras poblaciones melanesias, este grupo muestra un bajo porcentaje de ADN Denisova, sugiriendo la posibilidad de una tercera especie aún sin identificar. Aunque se sabe poco sobre los melanesios en general, esta tribu en particular resalta por albergar en su ADN una especie completamente desconocida.
Además de este enigma genético, los melanesios también poseen el síndrome de Waardenburg, un trastorno genético que afecta la pigmentación de cabello, piel y ojos y que, aunque raro a nivel mundial, se encuentra concentrado en esta comunidad. La investigación del científico Bohleneder destaca la importancia de comprender a estos antepasados, ya que compartimos una parte significativa de su ADN. Además, se sugiere una posible relación entre los neandertales y ciertas enfermedades, como las cardiovasculares.
Aunque la investigación genética aún tiene mucho por descubrir, este hallazgo no solo plantea preguntas intrigantes sobre nuestra historia genética, sino que también impulsa a la comunidad científica a profundizar en el estudio de estos misteriosos vínculos genéticos.