La mayoría de los clientes de los bancos españoles se muestra insatisfecho con el servicio que les prestaron las entidades a la hora de tramitar herencias y testamentería, según una encuesta elaborada por la Organización de Consumidores y Usuarios.
Según el sondeo, el 60% de los encuestados calificó de «insatisfactoria» o «muy insatisfactoria» la actuación de la entidad financiera con la que han tenido que trabajar en la tramitación de la herencia.
En el 38% de los encuestados denuncia que los bancos malinterpretan a su favor la solicitud de certificado de posiciones del fallecido, que es gratuito para los herederos, y lo ejecutan como un servicio de tramitación de toda la herencia, que tiene ciertas comisiones.
Otro problema sufrido por el 30% de los encuestados fue la falta de información o que esta no fue lo suficientemente clara por parte del banco, lo que llevó a los herederos a repetir trámites o entregar documentación complementaria en varias ocasiones, con el consecuente retraso del proceso.
Casi un 20% de los encuestados por la OCU afirma que en el proceso de tramitar herencias se les obligó a contratar un producto de la misma entidad como requisito para entregar los saldos depositados en distintos productos (cuenta corriente, cuenta de valores, cuenta de fondos, etc).
Además, los clientes acusan de dilatados tiempos de espera en la tramitación. El 45% de los encuestados afirmó que tuvieron que esperar más de seis meses, mientras que el 22% se encontró tiempos de espera superiores al año.
«OCU solicita al Ministerio competente y al Banco de España que regularicen este proceso para que todas las entidades estandaricen la prestación de este servicio de testamentaría», ha demandado el organismo. También ha pedido un «límite temporal» para acotar los procesos y que se sancione con intereses de demora en caso de que estos intereses se superen.